martes, 1 de julio de 2014

Ciclo

Había una hoja en el aire
volando
había una balsa en el agua
flotando
había una fruta en tu boca
esperando
el instante que rompa 
su inercia de vida

el diente que mande a la fruta al
olvido
la ola que hunda la balsa hasta el
fondo
el fuego que queme la hoja y el
bosque

y al mundo y al hombre
y empiece de nuevo
la inercia de cero
a cien, a infinito,
a fuego y a cero
de nuevo.

Qué necia la vida 
que es como una rueda
la vida, la historia, 
el amor que te quema 
y te quema
de nuevo.



2 comentarios:

Francisco Guillamet dijo...

"y empiece de nuevo
la inercia
de cero
a cien, a infinito,
a fuego y a cero
de nuevo.
Qué feo.
Qué fea
la vida que es como una
rueda"

Esa parte está zarpada. Igual no me parece feo el rodar de la vida. Me gusta más el fracaso emotivo que el aburrido progreso de las cosas. Jaja

Saludos muchacha

LuZcila dijo...

La repetición es emocionante o detestable depende de cómo queremos verla, cuándo y porqué. Jejeje en este caso fue dramática... tengo pendiente escribir un día en que la moneda cae de la cara feliz. ^.^